Your ads will be inserted here by
Easy Plugin for AdSense.
Please go to the plugin admin page to
Paste your ad code OR
Suppress this ad slot.
Se trata de dos conceptos que van prácticamente de la mano cuando invertimos. Y es que, cuanta mayor rentabilidad nos pueda aportar un activo, sometemos a nuestro capital a más riesgo. Por ello conviene tener claro qué tipo de inversor somos y hasta qué punto estamos dispuestos a poner en riesgo nuestro capital.
En qué consisten
Para poder valorar el riesgo que queremos asumir, debemos tener claro en qué consiste exactamente. Y es que el riesgo es el peligro que existe de no obtener la rentabilidad esperada cuando llevamos a cabo nuestras inversiones. Este tipo de operaciones son volátiles, cambian constantemente y muchas veces vamos a perder dinero en ellas.
Para tratar de perder la menor cantidad de dinero posible, tenemos que disponer de una buena formación para las inversiones. Así como tener claro qué inversiones no son para nosotros en base a la cantidad de riesgo que se deba asumir.
En el caso de la rentabilidad, ésta es el beneficio que los inversores obtienen cada vez que una operación sale adelante con éxito. Está estrechamente relacionada con el riesgo ya que, sin este, la rentabilidad sería nula. Por ello, tenemos que definir nuestro nivel de aversión al riesgo. Sólo de esta manera podremos operar en las inversiones de la mejor manera posible.
Cuál es la relación entre riesgo y rentabilidad
Estamos ante una clara relación directa entre ambos términos. Es decir, rentabilidad y riesgo van unidos en las inversiones. Así, cuanta mayor rentabilidad, mayor será el riesgo al que estaremos expuestos. No tendría sentido alguno una inversión con mucho riesgo y muy poca rentabilidad, y viceversa.
No podemos librarnos del riesgo en las inversiones. Por lo tanto, la solución para poder invertir de la manera más segura, es disponiendo de una buena experiencia en las inversiones. Dependiendo de la aversión al riesgo de la que dispongamos, por ejemplo si somos un inversor conservador no nos expondremos a altos riesgos al invertir.
Qué tipos de riesgo existen
A excepción de determinados productos financieros como productos garantizados y renta fija, siempre vamos a estar expuestos al riesgo en nuestras inversiones. De hecho, el riesgo no solamente implica no alcanzar la rentabilidad que queremos conseguir. También es posible perder parte o todo el dinero invertido.
Hay que tener claro que existen diversos riesgos a los que nos exponemos al invertir. Algunos de los más comunes pueden ser:
- Riesgo respecto al precio. En este caso, si el activo no evoluciona favorablemente y su precio desciende, estaremos perdiendo dinero. En este caso tenemos dos opciones: esperar a que se recupere (algo que puede no llegar a pasar), o dar por perdida la inversión.
- Riesgo respecto al tipo de interés. Este tipo de riesgo afecta sobre todo a la renta fija. En función del plazo, es decir, si este aumenta, las pérdidas serán mayores. En el caso de que los tipos de interés aumenten, el precio de la renta fija cae y nuestras inversiones se encuentran en peligro.
- Riesgo de liquidez. Cuanta menor liquidez tenga la inversión, más dinero acabaremos perdiendo.